Cesta Naranjas de Mesa y Sanguinas
Cesta Naranjas de Mesa y Sanguinas
Naranjas de mesa y sanguinas
Particulares, de vivo color y exquisito aroma, las naranjas de mesa y sanguinas sirven al paladar infinidad de opciones. Ambas tienen la misma calidad y traen a nuestro organismo infinidad de beneficios.
Las naranjas de mesa son grandes, de color intenso, libre de semillas y fáciles de pelar. Las sanguinas o naranjas de sangre como se conocen por su llamativo color rojizo, son más pequeñas, poseen pocas semillas y un extraordinario sabor agridulce. Te serán tan útiles en la mesa como para hacer zumos, ya que ofrecen bastante jugo.
Al natural es mejor
Las naranjas de mesa y sanguinas, como otros cítricos, aportan infinidad de nutrientes y beneficios a la salud. Si las consumes al natural podrás sacarle tanto o más provecho que en la cocina. Elige las más frescas, en FrutaMare las llevamos del árbol a tu casa en 48 horas. Come su pulpa, bebe el zumo o combínala con otras frutas.
Las naranjas son ricas en vitamina C, potasio y ácido fólico. Contribuyen a reforzar el sistema inmunológico y el sistema cardiovascular. Su contenido es bajo en calorías y alto en fibras, regula el índice glucémico, el colesterol y la tensión arterial. Tienen propiedades antioxidantes, antinflamatorias y anticancerígenas.
El toque agridulce más refrescante
Las naranjas de mesa y sanguinas aportan elegancia a los platos de la cocina mediterránea. De hecho, son las preferidas por los gourmets. Igualmente, también son elegidas gracias a que tienen un intenso sabor agridulce. Y en el caso de las sanguinas, un matiz atractivo para la elaboración de todo tipo de alimentos.
¿Has probado incluirlas en tus recetas? Prueba a añadir sanguinas en lugar de naranjas comunes y limones a tus preparaciones.
Añade sabor, fineza y calidad a bizcochos, carnes y ensaladas. Prepara vinagretas o sírvelas para refrescar platos grasos. Disfruta del contraste, decora tus recetas con una sucesión de gajos de naranjas, pomelos y mandarinas. Di adiós a los sabores sin personalidad.